Ayer, el dueño de una empresa donde brindé el programa «Atención de Clientes Difíciles», me comentaba que las técnicas que más «les cambió la vida» al equipo de trabajo son:
– Cada vez que se encuentran en una tensión entre personas, revisan el Triángulo dramático, identifican los roles y cambian la actitud. Esto les ayuda a resolver conflictos de forma rápida y simple, tanto con clientes como dentro del equipo de trabajo.
– Cuando hay una explosión emocional de un cliente, en cambio de reaccionar y defenderse, les ayuda diferencian entre pedidos y promesas, repasando los acuerdos firmados y los hechos ocurridos, de esta forma van llevando al cliente a conectarse con la realidad y a colaborar en la solución.